All you need is love...

Ayer no escribí nada por el día de los enamorados... después de todo, preferí pasarme toda la noche hablando con mi bienamada. Pero lo compensaré con la entrada de hoy. Sip... Hoy hablaré del amor.

Para mi, el amor tiene que ser el compromiso más profundo, la entrega más abnegada hacia el otro. Si la amistad es un vínculo de honor, emoción y razón; el amor tiene que ir aún más allá. Para mi no corre eso de que alguien que te atrae o que te parece bella o simplemente te gusta, es un amor. No... eso no basta.

Yo establezco claramente la diferencia entre gustar y amar. Si alguien te gusta es eso... te sientes atraido por esa persona y qué sé yo, por último te sientes abrumado y fuera de ti cuando estás con ella. Pero si amas a alguien eso implica ser fiel, sicero y comprometido con la persona. Implica querer conocerla tan a fondo como te sea posible y quererla como es. Si uno ama, ama a la persona por lo que es, no por lo que uno quiere que sea. Por eso, la idolatría y ese "ciego amor" no es, para mi, un verdadero amor. Solo si uno abre los ojos y ve al otro como realmente es, puede aprender a conocerlo, y a amarlo.

Al menos yo, estoy dispuesto a morir si fuese neceasrio por el bien de mi amor. Claro, prefiero vivir a su lado, pero si fuese indispensable no me lo pensaría.

Y claro, también hay cosas en que uno se pone tácitamente de acuerdo cuando ama. Por eso es que las miradas se tornan comunicativas, por eso es que uno lee en los gestos, en el rostro, el la respiración; por eso es que uno escucha como la otra persona nos habla con los latidos de su corazón. Y el cielo nos parece insignificante al lado de la calidez de su piel, del aroma de su cuello, del roce de su mano. En ese momento el mundo deja de ser. Sólo quedan dos personas en el mundo. Y te sientes más allá de ti.

Pero cuando estás lejos de tu amor, no sólo la extrañas, no sólo la echas de menos. Es un dolor mucho más profundo el que se siente. Es la pérdida de un pedazo del alma propia, como si arrancaran de cuajo un trozo de espíritu directamente desde tu pecho. Hay un vacío ahí, un espacio oscuro y anhelante que quema y congela. Pero no es, como suele ser con las personas que extrañan a quienes les gusta, una sensación egoista (y un poco ególatra) de extrañar tener a la otra persona. Lo que uno echa de menos es ser de la otra persona, fundirse con ella en un abrazo y ser uno.

Algunos dicen que el amor es egoista. Ellos no entienden como es en realidad. Eso no es amor, eso es el deseo de ser amados. La gente está obsesionada con ser amados y se preocupan muy poco por amar. Si uno no está dispuesto a entregarse por completo a la persona a la uno ama, entonces no ama. Y si uno no ama, jamás será amado.

Bueno... lo dejo hasta aquí. Podría seguir hablando de esto por párrafos y párrafos, pero no lo haré. Sería extenuante para todos.

Dedico estas líneas a la única mujer que he amado en toda mi vida. La mujer que me logró descongelar el corazón, que yo pensaba estaba muerto para siempre. Ella, que me hace reir, llorar y estremecerme de felicidad; la que, con su calidez y su sonrisa, me hace vivir. Te amo Stephanie. Que nuestro amor sea un puerto seguro en el mar de brumas que asolan a nuestro mundo de medias tintas y matices inciertos. Se mi luz guía en la oscuridad del futuro y yo seré tu coraza contra los embates del frío inclemente de la vida. Eres la única mujer con la que quiero pasar el resto de mis días en este mundo infinito.

Te amo.
(Mil besos para ti)

¡MUACK!